El 24 de julio de 2013 una jueza declaró civilmente casada a una pareja homosexual en Colombia. La decisión la tomó Carmen Lucía Rodríguez, jueza 67 municipal de Bogotá. La pareja es Carlos Rivera y Gonzalo Ruiz, quienes llevan veinte años conviviendo juntos.
¿Qué
pasó ese día?
La
pareja llegó al juzgado. Luego de cuatro horas, la jueza los declaró
civilmente casados, pero sin constituir un matrimonio. Se hizo un
"contrato de formalización y solemnización de la relación"
entre dos personas del mismo sexo. Esta figura tiene los mismos
efectos y procedimientos que un matrimonio, pero no se le puede
llamar de esta forma. Suena raro ¿verdad?
Hay
un vacío legal. Por eso la jueza, aceptó casar a esta pareja gay,
pero sin declararlos como un matrimonio. Si no te queda claro, dale
click abajo al reportaje que hizo una cadena de televisión local.
Contrato
civil de casados con los efectos del matrimonio, sin esa palabra
¿Cómo
llegaron a esta encrucijada en Colombia?
En
2011 la Corte Constitucional de Colombia ratificó que las parejas
del mismo sexo constituyen familia y le dio dos años al Congreso
para que legislara sobre esta materia. El plazo venció el 20 de
junio de 2013. El Congreso no hizo nada.
Luego
de esa fecha, las parejas gays y lésbicas podían legalizar sus
uniones ante notarios y jueces. En este tiempo, el procurador general
de Colombia ha sido el rostro más visible de la campaña homofóbica
en ese país. Les hablo de Alejandro Ordóñez, uno más que pasará
al basurero de la historia.
¿Y
qué pasó luego?
La
Unión Colegiada del Notariado de Colombia elaboró un modelo de
contrato denominado “formalización y solemnización del vínculo
contractual” para atender a las parejas gays y lésbicas que
vinieran a registrarse. Esta institución jurídica no existe en las
leyes de Colombia. Fue un invento tipo Frankenstein para atender la
ola de peticiones de matrimonio que se les iba a venir encima.
Los
grupos LGBTI no aceptaron esta decisión. O matrimonio o nada. Sin
embargo, Carlos Rivera y Gonzalo Ruiz no quisieron esperar y fueron a
un juzgado a registrar este tipo de contrato.
Sin
duda es un avance. Es más de lo que tenían antes. Algunos
consideran que al aceptar, se pierde la oportunidad histórica de
conseguir el matrimonio con todas las letras, derechos y deberes.
Yo
creo que es un avance. En España fueron consiguiendo contratos de
unión, uniones de hecho, y luego se dio el reconocimiento con el
matrimonio. Ahora mira cómo ha cambiado el mundo. Sólo en
Sudamérica ya dieron ese paso Argentina, Uruguay, Brasil y el DF de
México. Proyectos similares se tramitan en los congresos de Bolivia,
Cuba y Chile. En Venezuela estamos un poco rezagados en esa materia,
pero estoy seguro que más temprano que tarde llegaremos a ese punto.
Moraleja
¿Se
casaron o no se casaron? Pues, aparentemente sí, están civilmente
casados. Ahora falta ver si este "contrato de formalización y
solemnización de la relación" tiene los mismos beneficios que
un matrimonio en temas como coberturas de seguro, herencia,
decisiones de vida o muerte, adopción, oatria potestad, etc.
Dos
manzanas hizo una nota bien interesante sobre este hecho.
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