Este sábado 1 de octubre, los grupos LGBTI chilenos saldrá a las calles a marchar por el respeto a la diversidad sexual. La noticia me pareció genial. Cada año, los chilenos celebran el mes de la diversidad sexual en septiembre y los argentinos en noviembre. No lo hacen en junio, como el resto del continente.
Al principio pensé que era con una intención política: no ser una copia al carbón del movimiento LGBTI estadounidense y Stonewall. La necesidad de buscar fechas propias, latinoamericanas, pero un amigo de Buenos Aires me bajó de la nube.
Todos los años al sur del continente, el mes de junio coincide con el invierno. Intentar marchar en esa época es exponer a varios a una muerte segura por hipotermia.
Ya me imagino el titular “50 maricas, bolleras y trans mueren congeladas exigiendo sus derechos”.
Más allá de las razones para cambiar la fecha, me parece una excelente idea buscar efemérides propias, cercanas, latinoamericanas. De esa manera estamos ayudando a recuperar la memoria colectiva de nuestros movimientos.
¿Por qué Chile marcha en septiembre?
El 4 de septiembre de 1993 ocurrió un incendio en una discoteca gay de Valparaíso llamada Divine. Dieciséis personas perdieron la vida. El siniestro fue provocado y la justicia chilena engavetó el caso. Todavía no hay culpables. Movilh ha hecho varios informes sobre este atentado. Léelos aquí.
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